
A menudo la gente se pregunta si merece la pena llevar un teléfono móvil a reparar o si merece mucho más la pena comprar uno nuevo. En este artículo, le mostraremos cuándo debe llevar su smartphone a reparar.
Argumentos para reparar los smartphones
Para las reparaciones después del periodo de garantía, es una buena idea preguntar entre tus amigos si conocen a un técnico que haga un buen trabajo, porque los servicios de atención al cliente de los fabricantes, como Apple o Samsung, suelen ser caros. Sin embargo, no hay que acudir a un taller dudoso en el que la reparación sea muy barata, porque las piezas del móvil también tienen su precio. Los precios baratos de los talleres de reparación suelen ser sinónimo de piezas defectuosas o de poco valor para el teléfono móvil. Algunas piezas del teléfono inteligente, como el cambio de baterías, suelen poder sustituirse de forma fácil y barata, en cuyo caso merece la pena pagar el pequeño precio de volver a tener un teléfono móvil que funcione. En los casos afortunados en los que solo se ha roto algo en el exterior y el interior del móvil sigue siendo completamente funcional, a menudo se pueden cambiar por un precio bajo, pero los precios de un iPhone y de un móvil Samsung suelen ser muy diferentes. Además, la compañía de seguros puede cubrir una reparación si tienes un seguro de responsabilidad civil, pero solo si un tercero ha dañado el smartphone.
Cuando comprar nuevo es más barato
Dado que los precios de las piezas de los teléfonos iPhone y Samsung fluctúan mucho, la sustitución de las piezas puede resultar repentinamente cara, en algunos casos incluso más cara que un smartphone nuevo comparable, lo que ocurre especialmente con los dispositivos antiguos. Con el nuevo iPhone 13, que cuesta casi 1000 euros, la sustitución de la pantalla en el fabricante del iPhone ya puede costar más de 550 euros. En este caso, sin embargo, merece la pena porque los costes de la reparación son bajos en relación con el precio de compra. Así, el precio de un cambio de pantalla en un iPhone puede costar hasta 550 euros, y con más defectos, puede llegar a ser costoso. Asimismo, los precios en el fabricante de Samsung son similares para los nuevos teléfonos Samsung, con hasta 600 euros en el fabricante para un reemplazo. Sin embargo, debe tener en cuenta que siempre existe el riesgo de que se pierdan todos los datos durante la reparación. Por eso, a veces es aconsejable desprenderse de un smartphone estropeado y comprar un aparato nuevo, ya que, sobre todo en el caso de los aparatos antiguos, la renovación no suele merecer la pena. Al comprar un dispositivo nuevo, es mejor invertir una pequeña cantidad, porque incluso una película protectora barata y una funda pueden evitar daños graves.
Hágalo usted mismo bajo su propio riesgo
A veces puedes reparar tu móvil tú mismo sin ayuda profesional, lo que puede ahorrarte mucho dinero. A menudo se pueden encontrar en Internet piezas baratas para teléfonos móviles, como baterías, que se pueden utilizar para reemplazar piezas en el dispositivo por uno mismo. Sin embargo, debes ser consciente de que necesitas experiencia y las herramientas adecuadas. Para alguien completamente inexperto, esto puede salir mal rápidamente. En el peor de los casos, pueden incluso dañar más el aparato. Por lo tanto, hay que informarse bien de antemano si esa auto reparación merece la pena, porque a menudo también es un gran riesgo.